Cross es una camilla automática con alturas variables pensada para desarrollar un sistema operador-camilla-paciente que permita al operador sentir la camilla como pareja y no como herramienta, y al paciente desarrollar una actitud psicológica positiva y tranquila.
El chasis, moldeado para permitir operaciones más cómodas, es soldado y realizado con materiales específicos, no se oxida y no necesita un mantenimiento constante.
La posibilidad de reducir la longitud de la camilla levantando el respaldo asegura la maniobrabilidad en espacios confinados, rotando bien hacia abajo, bien hacia arriba. Además, la geometría y el chasis soldado dan a la Cross una estabilidad absoluta.
Cross es la primera camilla en el mundo con suspensión. A través del sistema patentado SCS (Spencer Compliance Suspension), la particular rigidez y la geometría curvada de las patas permiten suavizar los movimientos de las ruedas sobre el suelo y absorber los golpes hasta tres centímetros desde el suelo.
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Siempre intentamos superarnos, y trabajar sobre nuestros productos más desarrollados para llevarlos a la máxima eficiencia y calidad.
Así, para satisfacer las exigencias de nuestros clientes, hemos mejorado la capacidad de carga de la Cross, aumentando el diámetro de las patas anteriores y posteriores. Lo que nos ha permitido llegar a una capacidad de 250 kg manteniendo la dinámica de siempre.
Así es como ha nacido Crossover bajo el mismo teche de Cross.
El típico diseño de la Cross y el chasis cromado confieren elegancia, mientras las ruedas anteriores pivotantes permiten, gracias al sistema Twist, aumentar la ya excepcional maniobrabilidad de esta camilla tan elegante y asimismo tan potente.
Las diferentes alturas nos permiten evitar hacer esfuerzos con la espalda durante las operaciones de traslado del paciente.
Son las suspensiones que absorben golpes y vibraciones, no mi cuerpo.
Una ambulancia que lleva una camilla CROSS es toda otra historia.
Durante las operaciones de socorro un instante puede ser vital. La maniobrabilidad de la Cross te permite ahorrar segundos preciosos.
Soy socorrista, pero en una ocasión me ha tocado a mi subir en la camilla. Me han socorrido mis colegas. Ahora sé lo que se prueba y estoy aún más contento de que mi asociación utilice las camillas Cross.
Simplemente la mejor camilla del mundo por su relación calidad/precio. Hemos equipado con la Cross más de 100 ambulancias.
Las barandillas laterales se bajan con un solo movimiento y rotan hasta desaparecer permitiéndonos trabajar más cómodamente.
Cuando me han movido de la cama a la camilla no he chocado las espalda como me ha pasado otras veces.
La fijación 10G es fácil de instalar y se utiliza para todas las camillas automáticas de Spencer.
Una maniobrabilidad sin comparaciones: aún si se trata de pacientes por encima de los 100 kg, logro maniobrar la camilla con el mínimo esfuerzo
Para nosotros los que estamos obesos un pequeño movimiento puede resultar costoso. Cuando he subido a la camilla he pensado "Ahora se caerá" y ¡en cambio no! Mirándola no parecía tan resistente.
Trabajamos con las Cross hace años. Cuando los clientes se acostumbran a una camilla con suspensiones, luego no quieren volver nunca atrás.